EL ORDENAMIENTO VIAL EN MATÍAS ROMERO "CRISPA" A LA POBLACIÓN

Matías Romero.- El Operativo de Reordenamiento Vial en Matías Romero ha generado una nueva pugna y división de opiniones, pues mientras los conductores se dicen afectados por las multas y sanciones aplicadas por la Policía Vial Estatal al levantar sus unidades y llevarlas al corralón, los comerciantes y dueños de comercios aseguran que si no delimitan sus espacios, el comercio ambulante, semifijo y camionetas que venden productos en la calle se adueñan de las calles.

Una parte de la población aplaudió el que el día miércoles, 20 de julio, se realizara un operativo conjunto, donde las autoridades municipales se dieron a la tarea de liberar las calles de bancos, escaleras, anuncios, cajas y señalamientos que apartan lugares en donde no está permitido.

Mientras que otros, aseguran que deben ser parejos a la hora de realizar estas acciones, y pidieron que el operativo de reordenamiento vial en Matías Romero incluya al comercio ambulante, semifijo y carros que utilizan espacios 24 horas los 365 días del año para exponer sus productos, ya que las calles están invadidas y no dan espacios para que se estaciones correctamente las unidades.

Aunado, dijeron, a que no hay horarios para bajar mercancía y, generalmente muchas empresas de material de construcción y abarrotes, cierran por completo los pasos en horas de la mañana y de la tarde, mientras que las autoridades hacen como que no saben y como que no ven. Piden que se informe el monto de lo recaudado hasta ahora por multas, sanciones y arrastres por operativos de la Policía Vial.

Sin embargo, a menos de 24 horas de realizadas estas acciones, muchos comerciantes volvieron a hacer de las suyas y volvieron a colocar sus cajas, diablitos y anuncios para apartar sus espacios frente a sus locales.

A los señalamientos, también se incluyó el mensaje de muchos peatones, quienes piden a las autoridades que también se liberen las banquetas, ya que es imposible caminar en ellas, pues la mayoría de las tiendas muestran sus productos frente a sus locales invadiendo las baquetas, por lo que la gente se tiene que bajar a caminar sobre las calles.